

La 282F-0421 es una locomotora de vapor del tipo Beyer-Garratt (nombre que responde a la unión entre el apellido del inventor del sistema, Herbert William Garratt, y el nombre de la fábrica británica de construcción de locomotoras Beyer Peacock). Las locomotoras Beyer-Garratt (o simplemente Garratt) son máquinas articuladas concebidas para trazados sinuosos y con fuertes rampas donde se requería la máxima potencia y esfuerzo de tracción de las locomotoras. Catalunya fue pionera en la adopción de este sistema ya que, a finales de los años 20, la Compañía General de los Ferrocarriles Catalanes adquirió 8 unidades de ancho de vía de un metro a la casa belga St. Léonard para traccionar sus trenes pesados de mineral.

En vía ancha fue el Ferrocarril Central de Aragón la compañía que decidió comprar diversas máquinas Beyer–Garratt, tanto para los trenes de mercancías como para los de viajeros, y de esta forma eliminar la costosa doble tracción en los trenes de sus líneas, especialmente la de Valencia–Teruel–Zaragoza. El año 1930 llegaron al depósito del Central de Aragón, en Valencia–Alameda, 6 locomotoras Garratt de viajeros y otras 6 de mercancías. Los ferroviarios valencianos apodaron las majestuosas Doble Pacific de viajeros como Garraf, y las de rueda pequeña de mercancías como Garrafetes, en una clara derivación de su nombre inglés.
 Así pues, como Garrafeta es como se conoce a la 282F-0421   –matrícula oficial de RENFE– y último ejemplar  de las Garrafetes de   mercancías encargadas  por RENFE el año 1960, siguiendo el diseño original de   1930. Esta máquina prestó servicio en   RENFE hasta el 1972 y     a partir de esta fecha fue retirada en el antiguo depósito de    Vilanova i la Geltrú   (hoy en día Museo del Ferrocarril), donde permaneció   inactiva hasta el año 1988, en que fue   restaurada y puesta de nuevo en circulación.
Así pues, como Garrafeta es como se conoce a la 282F-0421   –matrícula oficial de RENFE– y último ejemplar  de las Garrafetes de   mercancías encargadas  por RENFE el año 1960, siguiendo el diseño original de   1930. Esta máquina prestó servicio en   RENFE hasta el 1972 y     a partir de esta fecha fue retirada en el antiguo depósito de    Vilanova i la Geltrú   (hoy en día Museo del Ferrocarril), donde permaneció   inactiva hasta el año 1988, en que fue   restaurada y puesta de nuevo en circulación.
Tras un cierto tiempo en que prestó servicio de forma intermitente, fue de nuevo apartada en Madrid, para ser recuperada definitivamente por ARMF el año 1996. Después de completarse su reparación fue incorporada al servicio de los Trenes Históricos. Desde entonces es conservada dentro de un riguroso programa de inspecciones y reparación.
Pertenece al Museo del Ferrocarril–Fundación de los Ferrocarriles Españoles y está custodiada por ARMF.